Hoy vivimos en un mundo donde la interconexión es parte de la columna vertebral de la sociedad. En este contexto, la ciberseguridad se ha establecido como un pilar fundamental para la protección y tranquilidad de individuos, empresas y gobiernos frente a amenazas virtuales cada vez más sofisticadas. Aquí, su rol trasciende los límites de la tecnología y se convierte en un elemento crucial para la ejecución de múltiples actividades en la sociedad moderna.

La variabilidad e impacto del cibercrimen en los últimos años ha sido una preocupación constante, no solo en las personas, sino también en las empresas. Y esto no es menor. Según la Encuesta Nacional de Ciberseguridad realizada en 2023 por el Centro de Estudios Tecnológicos de la Información de la Universidad Católica de Chile, “los incidentes de ciberseguridad incrementaron en promedio un 31,6% durante el año pasado. Además, el Benchmark de Gestión de la Ciberseguridad 2021 (parte de la ENCI) estableció que el 62% de las organizaciones ya indicaba que la prevención era prioridad número uno de inversión en materia de seguridad de la información” (Emol).

Los ransomware, malware, phishing y otras técnicas maliciosas han evolucionado hacia formas más avanzadas, causando pérdidas económicas, vulneración de información confidencial y pérdida de credibilidad en sistemas que deben facilitar nuestro diario vivir. Sí, parece una película de Netflix, pero la realidad que muchos vemos es más compleja que una serie de tv. Pero no hay que asustarse, para todo hay solución.

La ciberseguridad como aliada

Abordar el desafío de la ciberseguridad implica una respuesta en más de un aspecto. La colaboración entre sectores públicos y privados, la inversión en investigación y desarrollo, la implementación de regulaciones efectivas y la concientización pública son elementos clave para fortalecer la resiliencia frente a estas amenazas. Sumado a eso, la educación, como en todo aspecto, cobra importancia, pues entre más conocimiento temprano tengamos de la vulnerabilidad del sistema, más pronto podremos encontrar las respuestas adecuadas.

La creación de políticas y estándares de seguridad, el fomento de una cultura organizacional centrada en la ciberseguridad y el desarrollo de capacidades para detectar, prevenir y responder a incidentes son esenciales en la defensa contra ciberataques cada vez más sofisticados.

Por otra parte, la adopción temprana de tecnologías que ayuden a mantener la confianza de los usuarios y organizaciones, como el uso de servicios de encriptación de datos (cifrado de extremo a extremo), verificación biométrica para procesos o la utilización de métodos de doble validación (OTP: One Time Passwords), forman parte de una carrera paralela exitosa donde organizaciones y empresas se empoderan ante estas amenazas.

El futuro de la ciberseguridad

La tecnología no deja de avanzar ni un minuto y la ciberseguridad se posiciona como un desafío en constante evolución. La inteligencia artificial, el Internet de las cosas (IoT), los servicios en la nube y otros avances tecnológicos ofrecen beneficios significativos, pero también requieren de nuevos métodos y buenas prácticas de uso, exigiendo soluciones innovadoras y adaptativas.

Como ejemplo, el concepto de password de un sólo uso ha cambiado a través del tiempo. Hemos pasado desde la primera generación de token físico a el envío de mensajes encriptados que se autoeliminan una vez visibilizados, incluso estos se integran directamente en la aplicación de destino de los usuarios, agilizando los procesos previamente manuales.

Para OneMarketer, la ciberseguridad no es simplemente una preocupación tecnológica, sino un imperativo que nos desafía a innovar para mantenernos a la vanguardia y ser consistentes con los aspectos regulatorios. La protección de los activos digitales y la preservación de la confianza en la era digital dependen de nuestra capacidad colectiva para enfrentar y mitigar las amenazas cibernéticas.

¿Está tu empresa preparada para enfrentar los desafíos de la ciberseguridad en sus procesos internos y relación con sus clientes?